Vivíamos en una provincia, a hora y media de la capital, era pequeña, pero acogedora, tenía lo necesario para vivir tranquilamente y cuando alguna cosa no encontrábamos en las tiendas, teníamos cerca y muy accesible la capital, en un día podíamos ir, comprar y regresar, eran viajes que la gente de la comunidad los hacían con regularidad pues aquellos ochenta y tantos kilómetros que nos separaban, para nosotros era como dar la vuelta a la esquina. Es cierto, no era la gran ciudad, pero para los que hemos vivido en ella, era lo máximo, sentimiento natural de cualquier persona hacia la ciudad que lo vio crecer, pero en mi caso más que un sentimiento natural, es un amor muy especial, ya que fue la ciudad que no solo me vio crecer, sino que en ella, pase los momentos más inolvidables de mi vida, algunos dignos de compartir y otros de enterrar, pero inolvidables al fin y al cabo…
Sucesos que marcaron mi existencia, imprimiendo mi adolescencia y sellando mi madurez…
Sucesos que en los momentos más duros de mi vida me dieron la fuerza para alzar la cabeza y seguir adelante…
Sucesos que en la mayoría de mis fracasos representaron el no darme por vencida y seguir intentando…
Sucesos que en la mayoría de mis errores significaron no bajar la mirada sino mas bien alzarla y con orgullo saber pedir perdón…
Sucesos que en los momentos más tristes de mi vida me robaron una sonrisa y me dieron felicidad… sucesos que en los momentos más alegres de mi existencia me dieron paz interior y deseos de quererlos compartir.
Eso significa Huaral para mi, toda una retahíla de sucesos que, juntos, significan mi juventud, esa parte de tu vida que en más de una oportunidad ansias poder regresar…
Eso significa Huaral para mi, toda una cadena de experiencias que me han hecho lo que ahora soy, me han dado lo que ahora tengo y me han puesto donde ahora me encuentro…
No faltó quien le escribiera una poesía y más tarde la hicieran canción, ahora representa el himno de nuestra querida ciudad, no hay colegio que no la enseñe ni huaralino que no la sepa…
Huaral de mis amores
Huaral pueblo querido
Que encierras un ambiente
De vieja tradición
Son bellos tus paisajes
Bonitas tus mujeres
Eres Huaral querido
Un pueblo sin igual
Por eso te dedico
a ti Huaral querido
Esta canción que lleva
Toda mi inspiración
Y que al salir de aquí
Tu nombre evocare
Llevando tú recuerdo
Llevando tu alegría
Oh dulce tierra mía
Que lindo es mi Huaral.
1 comentario:
Hola, no sabía que escribías Guisella. Hay que practicar mucho. Es práctica solamente y lecturas. Hay veces que ayudan los talleres. Hay un taller por internet. Tienes que poner en google, "consignas para escritores de Jorge Eduardo Benavides" Es un escritor peruano muy bueno, de hecho creo que es el mejor de ahora, de estos tiempos y es bastante detallista. Asistir a su taller virtual, te podría ayudar, además es gratuito, sólo tienes que ser disciplinada, es de cuento, narrativa, pero ya verás todo lo que vas a aprender. Descubres detalles, cosas en la que normalmente uno no se fija, palabras, colores, y de pronto te empiezas a dar cuenta de que estás aprendiendo porque aunque requiere voluntad, es super bacán cuando descubres que empiezas a tener resultados. Yo estuve en un taller suyo en Madrid, un taller presencial, iba a su casa una vez por semana y me sirvió muchísimo. Hay cosas que te das cuenta con la práctica, pero un taller de este tipo te ayuda a controlar ciertos mecanismos para que los pongas en práctica. Aunque no participes, echarle un vistazo no estaría demás.
Hay un libro que te recomiendo, EL GRAN GATSBY, autor, Francis scott Fistzgerald, es norteamericano. Pero el mejor para mi gusto, de los autores norteamericanos es John Steinbeck, el libro se llama, DE RATONES Y HOMBRES. Ambos libros son de narrativa, te abren puertas. Hemingway decía que el mejor libro es aquel que cuando lo estás leyendo te obliga a escribir. Yo ahora estoy inmerso en mi novela, la quiero terminar pronto y quiero publicarla. Está bacán tu página. Bueno, saludos. Un beso.
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